martes, 2 de mayo de 2017

CAPITULO 9 (PRIMERA HISTORIA)




Durante los siguientes tres días, Pedro trabajó como un loco. 


Se desplazó a todos lados, para discutir con el fiscal de distrito, examinar evidencia, revisar toda la documentación que había reunido la policía y hacer lo que fuera por conseguir que retiraran los cargos.


Durante el día, mantenía a Paula cerca. Algunas veces trabajaba con Marcos y su equipo.


Otras, la tenía al lado mientras el equipo legal examinaba la evidencia.


Pero lo más difícil eran las noches. No la dejaba regresar a su casa, inventando una u otra excusa para hacerla dormir en la suya. Todas las noches le preparaba la comida y conversaba con ella sobre lo que se le ocurriera, mientras bebían vino o cerveza. Le encantaba el hecho de que ella disfrutara de ambos.


Y todas las noches, la besaba para darle las buenas noches, disfrutando del modo suave en que ella respondía al contacto con él. Tocarla no dejó de volverlo loco, pero se cuidó de no dejar que las cosas se salieran de cauce. 


Resultaba difícil porque su cuerpo temblaba por poseerla. 


Pero había un límite que no cruzaría, y hacerle el amor a una
clienta, especialmente a una tan vulnerable y amable como Paula, era algo que sencillamente jamás haría, sin importar cuánto sufriera su cuerpo.





1 comentario: